Diarreas

Son las evacuaciones demasiadas frecuentes y semilíquidas. Pueden deberse a varias razones: infecciones, fermentaciones intestinales, intoxicaciones, enfermedades del hígado, alimentos descompuestos, falta de vitaminas.
En los niños pequeños una de las causas muy frecuentes de este problema está en el uso de biberones mal lavados o en el tipo de leche que se les dá, sobre todo cuando se tratan de formulas que tratan de reemplazar a la leche materna.
También el abuso de antibióticos orales (tomados por la boca), o los medicamentos que contienen hierro y que irritan la mucosa estomacal e intestinal pueden producir las diarreas.

Tratamiento
Es necesario reponer el agua perdida con las evacuaciones dándole abundante líquidos para evitar la deshidratación.
Para contener las diarreas muy abundantes prepara un cocimiento a base de media pepa de palta o cáscara de granada en medio litro de agua, hervir 5 minutos y añadirle una cucharadita de anís, tómese a sorbos. Con esta agua puede prepararse panetelas de arroz, manzanas (sin cáscara) o membrillo para las criaturas. Una vez calmada la diarrea la alimentación será ligera; caldo de cereales colado, puré de papas, yogurt, etc.
Las madres deben de lavar con esmero su seno antes de dar a lactar (mamar) a su bebé y si por alguna razón es necesario el uso del biberón, desinfectarlo antes con agua hirviendo juntamente con la tetina o chupón. Se recomienda tener mucho cuidado al escoger el tipo de leche que se le ha de dar al lactante, son más recomendables las formulas preparadas a base de soya.